Hola Santi,
te escribo unas palabras para que sepas que le ruego a Dios tener furezas para vivir y convivir en sociedad como las personas normales... y saber distinguir entre el bien y el mal.
Tengo ganas de verte y reír contigo a carcajadas. He aprendido de ti, mi maestro, pero soy un cachorro todavía, tengo mucho que aprender. Fuiste y serás mi Rey Mago porque cuando pienso en ti siempre tengo un regalo, tu buen corazón que ha atrapado al mío para curtirlo.
No tengo palabras para decirte que toda la amistad que me has otorgado es un principio, al que le doy gracias a Dios.
Aitor
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