Somos un grupo de internos de una unidad de rehabilitación situado en el centro penitenciario Brians 2. Este proyecto surgió por parte del equipo profesional que trabaja con nosotros, con la intención de poder expresarnos de otra forma y a través de un soporte más informal a la vez de ampliar nuestros conocimientos con los nuevos soportes multimedia y poder compartir nuestros pensamientos con vosotros, que gracias a este blog podemos ir más allá de este muro y enriquecernos con vuestras aportaciones.

domingo, 21 de agosto de 2011

DAME UN GRANITO DE ARENA

Mama, hace poco, muy poco te pedí que me dejaras depositar en nuestra vida tan solo un granito de arena, para que con el tiempo conseguir una playa entera, entera de confianza, amor y alegría, poniendo de mi parte esfuerzo y ganas de vivir.
Mama, estoy en ello. Tu por los años que has padecido por mi mala vida, sabes que esa playa la hubiese podido haber conseguido ya, pero yo la convertía en arena de desierto, donde se malvive con escorpiones, arañas y serpientes. Tú bien me lo advertiste, que estaba en un desierto solo, rodeado de toda clase de alimañas, y me diste muchas veces la oportunidad de vivir en un paraíso como playa.
Mama, noto un cambio en mi, ese desierto me ha quemado y desgastado mucho y estoy cansado. La arena de ese desierto no me dejaba ni oírte ni verte.¡¡QUE RABIA MAS GRANDE!!
Mama, ahora te veo, te escucho y te siento, siento que te quiero y por eso, yo me quedo contigo para montar esa playa, poquito a poquito y hacer de ella un paraíso.

T´ESTIMO MARE...

domingo, 14 de agosto de 2011

Mi Porsche





Cuando tenía 25 años, compré una carrocería de un deportivo marca Porsche. Estaba totalmente abandonado, pues llevaba 4 años o más en la intemperie. El motor estaba
medio desmontado y oxidado con arena en los cilindros y el estado de pintura era muy degradable, lleno de resina de los arboles. Lo bueno que tenía, eran sus llantas y neumáticos y su interior tenia olor a humedad y moho en su tapicería.
El caso que me gustó mucho su línea deportiva y lo compré por 200.000 pesetas. Lo trasladé a un taller de un conocido, habiéndole hecho antes una buena limpieza y quitado toda la resina de los arboles de los cristales, luego en el taller este, el mecánico llamó a varios desguaces y localizó un motor, fuimos al sitio y el mecánico y yo pusimos en funcionamiento ese motor que pertenecía a un modelo de Porsche como el mío, lleguemos a un acuerdo con el desguace y cómo funcionaba bien, me salió desmontado y trasladado al taller por 80.000 pesetas. El mecánico cambio el motor y la batería y creo que me cobró 40.000 pesetas, después me encargué del papeleo de cambio de nombre, tuve que ir a Barcelona,  al edificio Mapfre y negociar para pagar el último impuesto de circulación, ya que se debían varios años, cuando terminé estaba
entusiasmado por conseguirlo. Luego llevé el Porsche a pasar la I.T.V. pensando que no la pasaría  y la pasó con ciertos fallos, que pensé en reparar mas tarde.

Ya conducía mi coche, ¡más contento me sentía yo! Luego al tiempo, lo pinté en un
taller, me lo pintaron de azul eléctrico con algún fallo que no se apreciaba pues solo
me costó 100.000 pesetas, todo ello trabajando, yo en montaje y desmontaje de cristales,                          
tapicería, asientos, etc. Luego me decidí en reparar los fallos que tenía, con el tiempo
apareció en un desguace de un conocido un Porsche como el mío, más moderno eso si, y con 5 velocidades, llegué a un acuerdo con Jaime y lo compré por 120.000 pesetas. Como tenía un local alquilado, lo llené de todas las piezas y recambios de ese Porsche, desmontándolas en el desguace y transportándolas en mi furgoneta Renault 4, ya que en los desguaces no  dejan llevarte el coche. Pues como ya tenía todo,  me decidí ha hacer de mecánico; empecé reemplazando las piezas defectuosas del mío por las que adquirí, tales como la amortiguación, el puente trasero, la cardan y el cambio y también repasando lo que el mecánico me dejo mal. Total que me volví experto en mecánica cambiando yo solo también el motor a lo 2 años después debido a una avería que tuve. Durante el transcurso del tiempo que tuve ese Porsche le adapté elevalunas de otro coche de diferente marca, cierre centralizado, alarma que modifiqué en electrónica y me abría las puertas y subía los vidrios y aunque en otro Opel que tuve arrancaba a distancia con el mando,  a este Porsche no me dio tiempo que hiciera lo mismo, pero si le cambié el salpicadero, adaptando el de otro vehículo diferente y igualmente un cuadro de pantalla digital del GSI  modificando la instalación, parecía por dentro el coche fantástico,  pero al año cambié de idea y le cambié el salpicadero por uno original que compré en el desguace. Luego la tapicería la fui intercambiando ya que tenía repuestos, le puse taloneras que le daban una línea  atractiva, también adaptadas, y a los 3 años de tenerlo de color azul eléctrico, decidí  llevarlo a un taller de pintura bueno y me lo pintaron amarillo como Ferrari.

¿Qué opináis?